3 buenas razones para cambiar a agua purificada

Cuando muchas personas preparan una bebida o cocinan su comida, tienden a usar alimentos que realmente disfrutan. Todos tenemos una marca favorita de café o té y podemos invertir en alimentos orgánicos para mejorar nuestra salud. Pero, hay un ingrediente clave utilizado en la preparación de estos alimentos que tendemos a olvidar, el agua. El acceso a agua potable limpia es esencial para la vida humana, pero fuera de esta necesidad básica, el agua de mala calidad puede afectar nuestros alimentos y bebidas de formas sorprendentes. En este artículo, veremos tres buenas razones para cambiar a agua purificada para beber, cocinar y hornear.

1. Alimentos brillantes y vibrantes

Muchos expertos en salud creen que el brillo y los colores de nuestros alimentos nos pueden decir mucho sobre el contenido nutricional. El agua dura o de mala calidad que puede contener contaminantes puede hacer que la comida que prepare se vea aburrida y poco apetecible. La causa habitual es el cloro añadido en la planta de tratamiento de agua municipal para desinfectar el agua. Este químico actúa como un blanqueador, puede impartir un sabor y olor a “piscina” y hacer que la comida se vea insulsa. El cloro y la cloramina (cloro mezclado con amoníaco) se usan comúnmente con fines de desinfección, pero existen mejores formas de limpiar el agua. En los últimos años, los subproductos del cloro se han relacionado tentativamente con problemas de salud graves, pero se necesita más investigación.

2. Disfrutar el verdadero sabor de las bebidas y la comida

La presencia de cloro y otras impurezas en el agua del grifo puede alterar el sabor y el olor. El agua potable debe tener un sabor neutro y un olor fresco. El mal sabor del agua se puede traducir en las bebidas que preparamos, lo que las degrada significativamente. El agua de mala calidad puede incluso afectar la preparación de alimentos y esos sabores pueden transferirse a frutas y verduras. Cuando las personas cambian al agua purificada, a menudo se asombran del «mejor sabor» de sus bebidas y comidas favoritas. Pero, sería más exacto decir que están experimentando los verdaderos gustos por primera vez.

3. Mejores resultados de horneado

La repostería es una ciencia. Seguir las recetas puede ayudar, pero si los ingredientes son malos, no hará mucha diferencia en los resultados finales. Muchas personas logran obtener resultados de horneado decentes incluso con agua de mala calidad, lo que es un testimonio de sus habilidades. Pero, para la mayoría de nosotros, el agua de mala calidad puede arruinar nuestros esfuerzos para hornear porque los panes no se levantan y las galletas no se pueden cocinar de manera uniforme. El principal problema es el contenido de minerales disueltos en el agua dura (calcio y magnesio) y el cloro añadido en la planta de tratamiento de agua. Degradan el rendimiento de la levadura y pueden cambiar la estructura del gluten en la masa. Esto tendrá un efecto dramático en la fermentación que hará que la cocción falle.

En conclusión

Cambiar a agua purificada y más blanda puede tener un efecto positivo en muchos aspectos de su vida hogareña y eso incluye la comida y la bebida. La instalación de un sistema de ósmosis inversa (OI) eliminará una amplia variedad de contaminantes, incluidos el cloro y la cloramina. Agregar un ablandador de agua eliminará los minerales disueltos y hará que el agua sea más fácil de usar. Si desea obtener más información, comuníquese hoy con su especialista local en tratamiento de agua.