La única forma confiable de lidiar con los problemas de agua dura en su hogar es instalar un sistema de ablandador de agua. El agua dura puede afectar muchos aspectos de nuestras vidas de manera negativa, incluida la piel seca, el cabello enredado, los daños a los electrodomésticos, la corrosión en las tuberías y más. Pero muchas personas son reacias a instalar un ablandador de agua porque han escuchado cosas negativas sobre esta tecnología. En este artículo, examinaremos con más detalle tres mitos comunes sobre los ablandadores de agua y los desacreditaremos para ayudarlo a tomar una decisión informada.
1. Un ablandador de agua puede agregar sal al agua
Este mito es solo parcialmente cierto porque la gente realmente no entiende cómo funciona el ablandador de agua. El método de ablandamiento del agua más confiable es el proceso de intercambio iónico y esa es la fuente del mito. El agua dura contiene niveles elevados de minerales disueltos, incluidos calcio, magnesio y hierro. Esta agua pasa a través de un lecho de resina, se aplica una carga positiva y los iones minerales se intercambian por iones de sodio o potasio. Tanto el sodio como el potasio son sales, por lo que, en esencia, se agrega sal al agua, pero esto ocurre en una escala que la mayoría de la gente no notaría. Es cierto que las personas sensibles a la sal y con una dieta baja en sal pueden verse afectadas y deben consultar a su médico sobre este tema. Las personas sensibles a la sal pueden optar por una sal ablandadora de agua a base de potasio, que es menos dura que las alternativas de sodio.
2. Un ablandador de agua elimina los minerales esenciales
Los tres minerales principales que se encuentran en el agua dura son calcio, magnesio y hierro. Es cierto que todos estos son minerales esenciales que necesitamos consumir todos los días para mantenernos en forma y saludables. Por lo tanto, parecería ser una mejor idea desde el punto de vista de la salud mantener estos minerales en nuestra agua potable. Pero, la verdad es que estos minerales de agua dura son inorgánicos y nuestro cuerpo no los absorbe fácilmente. La mejor manera de acceder a estos minerales es a través de los alimentos o con suplementos. Cuando las plantas están expuestas a estos minerales, pueden convertirlos en un formato fácilmente accesible que podemos absorber fácilmente. Esto significa que es una mejor idea comer frutas y verduras para obtener los minerales que necesitamos.
3. Un ablandador de agua deja una película delgada en la piel
Es cierto que muchas personas que cambian a ducharse y bañarse con agua blanda tienen una sensación diferente en la piel. Cuando nos lavamos con agua dura, el mismo material que forma espuma de jabón y escamas queda en la superficie de nuestra piel. Esta es una película delgada que obstruye los poros y evita que nuestra piel y cabello produzcan aceites naturales. Esto puede provocar brotes, piel seca y con picazón, y esos temidos días con mal cabello. Lo contrario ocurre cuando se utiliza agua blanda, pero estamos tan acostumbrados a la sensación de ese contenido de película mineral que cuesta acostumbrarse. Muchas personas que usan agua blanda disfrutan de esa sensación de “piel resbaladiza” que indica que su piel y cabello están realmente limpios.
Si desea un ablandador de agua para su hogar, comuníquese hoy con su especialista local en tratamiento de agua.
